El invierno se aproxima, las temperaturas se desploman y las familias se preparan para el cambio de armario. Dependiendo de la zona geográfica, los hogares tienen instalados sistemas de calefacción integrales y de agua caliente sanitaria. Aunque mayoritariamente, en zonas más urbanas y próximas a grandes núcleos poblacionales y con temperaturas más amables, las familias optan por sistemas más económicos y que requieren menos instalación como son las bombas de calor. Desde RoigSat, te explicamos en qué consiste este sistema de refrigeración, qué tipos hay y cómo funciona.
¿Qué es una bomba de calor?
Una bomba de calor es un sistema de refrigeración que consiste en transportar el calor en vez de generarlo. Y ¿cómo se hace esto? Usando la energía térmica de un ambiente frío.
De bombas de calor hay de varios tipos, de calor aire-aire, de calor aire-agua, de calor agua-agua, de calor geotérmica, de calor de absorción, de calor de gas y de calor de alta temperatura. De las más conocidas son las que incluyen de base los aparatos de aire acondicionado, tradicionalmente los denominados splits.
El funcionamiento de una bomba de calor
Este tipo de sistemas funcionan del mismo modo que una nevera, pero al revés. El calor siempre se mueve del cuerpo más cálido al más frío. La bomba extrae la energía térmica del aire, agua o suelo, transfiriéndola a un fluido refrigerante que se comprime y circula en un circuito cerrado.
Después este fluido absorbe el calor del entorno, lo convierte en gas que se dirige a un condensador y hace que se pueda transmitir de manera eficaz al agua que se usa para la calefacción.
Bomba de calor, un sistema eficiente
Este sistema de refrigeración es uno de los más solicitados en la actualidad, ya que combinado con placas solares fotovoltaicas, por ejemplo, permite un ahorro considerable en los hogares del suministro de calefacción.
